Síndrome alienación parental. ¿Cómo reconocerla?
Sonia Martínez Alonso
Un 25% de los divorcios que se produjeron en nuestro país durante 2015 fueron contenciosos, y por lo general, en ellos se producen situaciones traumáticas para los niños. Los conflictos más frecuentes y de más dificultad de solución judicial son aquellos relacionados con el cumplimiento del régimen de visitas.
En muchas ocasiones y de manera errónea los cónyuges utilizan la presencia de niños como arma arrojadiza llegando a producir en ellos lo que los expertos han catalogado como Síndrome Alienación Parental (SAP).
¿Qué es el síndrome alienación parental?
El Síndrome Alienación Parental fue acuñado por primera vez por el psiquiatra Richard Gardner, refiriéndose a la campaña de denigración que inicia uno de los progenitores hacia el otro durante el proceso de separación y el litigio por la custodia de los hijos, provocando en el niño desinterés, repudio o animadversión hacia el progenitor instigado. Los niños terminan por hacer suyas frases descalificativas que el progenitor o progenitora pronuncia para referirse a su pareja, y que a la larga provocan en el niño un rechazo abierto. Claros ejemplos de ello, detectadas en entrevistas psicológicas, son respuestas del tipo "mi mamá es mala y no me quiere"; "mi papá me mandó un regalo para mi cumpleaños y yo lo tiré a la basura"; "si mi mamá me llama por teléfono, no le contesto"; "un juez me obliga a tener visitas con mi papá".
En muchos procesos contenciosos algunos jueces ya están comenzando a examinar la presencia del síndrome alienación parental en los menores, y en casos extremos pueden llegar a quitar al progenitor instigador la custodia de su hijo.
El Síndrome Alienación Parental es generado por una manipulación de uno de los padres
En este momento no existen datos estadísticos de cuántos casos existen en nuestro país de niños que sufran el síndrome alienación parental ya que aún no ha sido aceptado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como trastorno.
Consecuencias que padece el niño manipulado y que sufre Síndrome Alienación Parental
- Trastornos de ansiedad: aceleración de la respiración, temblores, lloro extremo... todo ello lo presenta en los momentos en los que el niño tiene que tener contacto con el progenitor acusado (visitas por ejemplo).
- Trastornos del sueño: pesadillas, terrores nocturnos, insomnio...
- Trastornos de la alimentación: pérdida de apetito, vómitos, pérdida de peso, atracones por ansiedad...
- Conductas agresivas: suelen producirse junto a los episodios de ansiedad, exteriorizando la rabia a través de agresiones verbales e incluso físicas.
- Conducta de evitación: el niño muestra una conducta ansiosa exagerada que en alguna ocasión le ha valido para evitar el contacto (las visitas por ejemplo).
- Dependencia emocional: el niño llega a pensar que odiando a uno de sus progenitores el otro lo querrá más y nunca le abandonará.
- Dificultad de expresión y comprensión de emociones: suelen centrar su emociones en aspecto negativos y comienzan a carecer de empatía hacia el progenitor acusado.
Ante todo esto tenemos que dejar claro que el SAP no surge porque una pareja ponga fin a su vida en común y decida separarse, sino por hacer a los hijos partícipes de los posibles conflictos que surjan en ese proceso.
"Papá, mamá no me hagáis esto, juntos o separados siempre seréis mis padres"
Comentarios
Sonia Martínez Alonso.
Ante todo, saludo, agradecer la información facilitada en relación al Síndrome alineación parental, desde mi perspectiva, trabajar el mismo a través de los padres, justo al momento de planteada la separación, sería de vital importancia, dado que, en ocasiones podríamos considerar actuaciones bien o mal intencionadas por parte del padre o la madre, es una especie de lucha de poder por ganar el afecto de los hijos o por generar una reacción por parte de la pareja que propuso la separación.