¿Cuál es la diferencia entre Benchmarking y benchmarketing?

Benchmarking y benchmarketing: que ambos conceptos son casi idénticos en su grafía (solo los separan tres letras) y que comparten origen anglosajón es algo evidente. Que se usan de forma cada vez más habitual en los medios de comunicación y poca gente los distingue (o conoce) es una realidad.

En el actual afán desacerbado por expresar en términos de rentabilidad económica cualquier actividad y en la relevancia que este hecho parece tener para la información del gran público a través de los medios de comunicación tiene su origen la aparición de estos términos y otros muchos también relacionados con las finanzas y la economía.

Diferencia entre benchmarking y benchmarketing

El vocablo “bench”, presente en ambos, podría traducirse en este caso concreto como “referencia”, aunque tiene varias acepciones en inglés además de esta. Por tanto, cuando hablamos de benchmarking nos referimos a la gestión empresarial que se realiza en una empresa en función de la que se lleva a cabo en otra elegida como referente.

En el caso del benchmarketing, las políticas en este campo (sobre precios, distribución, comunicación y el propio producto principalmente) se desarrollan también según las líneas de acción que la compañía elegida como referente aplica.

Para llegar a ser una empresa de referencia, cualquier compañía que sea galardonada con este apelativo tan codiciado ha de tener un reconocido prestigio en su sector que debe, además, quedar patente en una abultada cuenta de resultados cuya opulencia lleve a los accionistas y empresarios de otras firmas a seguirla con la intención de imitar sus estrategias de éxito. Por ejemplo, en el mundo de los refrescos “Coca-Cola” sería el referente por excelencia y lo que hiciesen las otras compañías del sector en su gestión para parecerse a ella se denominaría benchmarking. Este ejemplo nos sirve también para dejar de manifiesto que el benchmarketing se incluiría dentro del benchmarking de igual modo que el marketing se considera una rama de la gestión empresarial.

Aunque sea de vital importancia seguir a la competencia, en ningún momento las técnicas de bechmarking deben sustituir a la creación de una ventaja competitiva que sea estable y difícil de imitar. Esta es, en la mayoría de los casos, la causa que propicia que una empresa que ha conseguido ser referente en su sector sea considerada como tal por sus competidores. En muchas ocasiones, las empresas y sus gestores están tan centrados en su competencia que olvidan enfocar su actividad a sus clientes (actuales y potenciales) y su mercado, en donde residen realmente las verdaderas claves del éxito empresarial que harán de la primera empresa que sepa encontrarlas y explotarlas el líder indiscutible de su sector de actividad.