Las técnicas de shadowing podrían protagonizar el nuevo best seller de nuestro agente favorito 007 (pero sin que nadie salga herido). Un buen espía “trabaja desde la sombra”, se mueve desde un segundo plano sin que nadie detecte su presencia.
Job shadowing es la técnica de observación y aprendizaje más efectiva tanto para incorporar nuevos perfiles a la empresa como para desarrollarse dentro de ella.
Desde pequeños, aprendemos en muchas ocasiones de lo que vemos y vivimos y finalmente lo imitamos. Es una acción que nos resulta familiar y fácil a la hora de ejecutar. Por lo que, ¿por qué no aplicarlo al ámbito laboral?
En este post te cuento detalladamente qué es, por qué es tan útil y todos los beneficios que ofrece.
Qué es el shadowing
El shadowing es una técnica muy usada por las empresas, que tiene como finalidad adaptar a la organización nuevas incorporaciones. Es decir, está basado principalmente en el “aprendizaje en la sombra”. La finalidad principal es que el nuevo empleado observe atentamente a un experto en el área al que vaya a incorporarse. Este proceso se realizará durante un tiempo determinado. La tarea principal será familiarizarse con las rutinas, técnicas y comportamientos clave del puesto al que va a incorporarse. Mediante esta práctica y la observación directa, el trabajador podrá resolver cualquier consulta directamente con el responsable del puesto.
El proceso de inserción laboral será clave para que el trabajador adquiera todos los conocimientos necesarios para desempeñarse en su nuevo puesto. Además qué mejor forma de realizarlo que acompañando a un profesional en su día a día.
Esta técnica es utilizada en ámbitos públicos y privados, y hasta en el ámbito educativo. Ajustándose eficazmente a los niveles formativos y de experiencia laboral. Además, será un momento clave para valorar las competencias profesionales del trabajador.
Ventajas de las técnicas de shadowing
Algunos de los beneficios que podemos encontrar en este tipo de técnicas son los siguientes:
- El proceso de observar todas las acciones de otra persona incrementa la comunicación. Esto conlleva a una mejora en el clima laboral. Ya que hace participe a toda la plantilla.
- El trabajador que desempeña el rol de orientador tiende a valorar mucho más su puesto de trabajo. Haciendo que se desarrolle un sentimiento de pertenencia.
- Ayuda a familiarizarse con la cultura empresarial y los valores principales de la empresa. Conocer la filosofía de la empresa será primordial para su buen desarrollo.
- Se puede examinar el valor real que conlleva el aprendizaje de un nuevo trabajador. El proceso conlleva unos costes y tiempo que deberá cuantificarse y valorarse.
- El nuevo fichaje tendrá una visión global de la empresa.
- La formación puede conllevar a detectar carencias y necesidades en el departamento. Pudiendo así realizar posteriormente todos las modificaciones pertinentes.
- Ayudan a mejorar las habilidades sociales, tanto del nuevo empleado, como entre departamentos. Todos son participantes en este proceso. Además contribuye a una mejora del networking.
- El intercambio de ideas y conocimientos aumentará las relaciones interpersonales entre trabajadores.
Una buena técnica shadowing, no debe encasillarse solo en el proceso de bienvenida y adaptación de un nuevo trabajador. Sino también para realizar una promoción interna. Esto ayudará a que los veteranos crezcan dentro de la empresa conociendo cada parte de la organización.
Conocer de primera mano cómo funciona la empresa, puede desarrollar un mejor desempeño en el puesto y hasta una mejora de cara a los clientes.
Qué tipo de técnicas shadowing existen
Existen dos técnicas shadowing que pueden experimentarse en el ámbito organizacional. Son la siguientes:
Shadowing para estudiantes
Este primer tipo es una puesta en escena de cómo comenzar la vida laboral. Su finalidad es orientar a los estudiantes a conocer el funcionamiento empresarial. Aprenderán a cómo desarrollarse en un ambiente laboral y conocer de primera mano cómo se desarrolla todo internamente. Esta forma de inserción laboral ofrece muchas ventajas para los estudiantes. Tras su periodo de formación podrán poner en prácticas todo lo aprendido. Pero además para las empresas la incorporación es muy positiva, ya que conlleva nuevas ideas y nuevos perfiles laborales con muchas ganas de darlo todo.
Un ejemplo claro de shadowing para estudiantes son los estudiantes becados.
Este tipo está más enfocado a un perfil más experimentado y con trayectoria laboral. El proceso de observación y aprendizaje junto a un líder en el área, es la mejor forma de desarrollo laboral. Su integración se basará en conocer y adquirir procesos, acciones y hábitos de un veterano de la empresa, hasta convertirse en uno de ellos. Este tipo de observación y evaluación ayudará a mejorar el desarrollo y detectar carencias.
Este tipo de shadowing también se puede aplicar en grupos de trabajo. Tendrá como finalidad mejorar y optimizar al equipo, haciendo que sus integrantes cooperen y den los mejores resultados
Cómo llevar a cabo un buen shadowing
Para llevar a cabo un buen shadowing, deberemos de garantizar los siguientes apartados:
- Realizar un proceso de aprendizaje en el que estén claras las fases por las que debe pasar el aprendiz. Deberemos empezar por conocer la empresa, tareas y procesos clave.
- Que la incorporación tenga como finalidad lograr resultados positivos para la empresa.
- Animar al empleado a familiarizarse con la plantilla y con los compañeros con los que vaya a trabajar. De esta forma, se establecerán relaciones profesionales e interpersonales.
- Garantizar toda la información necesaria sobre el puesto, procesos, funciones y herramientas necesarias para desarrollarse.
- Que este proceso se desarrolle de la forma más ágil posible, ya que se realizará en su proceso natural de trabajo.
¿Crees que este método es tan eficaz como lo cuentan? ¿Serías capaz de aplicarlo en tu organización? Escríbelo en los comentarios.
