Seguro que en una entrevista de trabajo alguna vez te han hecho la pregunta: ¿Cómo te ves en los próximos 5 años? Pues la respuesta tiene que ver con el concepto de plan de carrera profesional.
Un plan de carrera es una proyección profesional y personal estructurada en pasos para conseguir tus objetivos. Es decir, para lograr mejorar y desarrollarte laboralmente.
Tener un plan de carrera no garantiza resultados inmediatos, pero no tenerlo casi siempre lleva al estancamiento.
¿Qué es un plan de carrera?
Más allá de definiciones teóricas, como decíamos, este plan de desarrollo profesional es una hoja de ruta donde se traza un plan estratégico para lograr tus objetivos profesionales. O dicho de otra forma, es una construcción activa de la identidad profesional de una persona.
En este proceso intervienen nuestras motivaciones, autoconocimiento, los intereses y las actitudes a través de una constante toma de decisiones que conforman la elección profesional final. Consiste así en un proceso consciente en el que el pasado y el presente interactúan para construir el futuro y, con él, el fin último: la realización laboral.
No obstante, esto se puede aplicar tanto para quienes buscan mejorar y crecer profesionalmente, como para las empresas que quieren motivar a sus empleados brindándoles la certeza de que, si hacen un buen trabajo, podrán mejorar sus condiciones.
Ventajas del plan de carrera para el empleado
Muchas personas no planifican su carrera, sino que van encadenando proyectos u oportunidades, sin un plan previo. En muchas ocasiones no es porque no quieran hacerlo sino porque no saben cómo crear un plan de carrera o porque directamente asumen que es la empresa quien debe tomar la iniciativa.
Nuestra ruta de plan de carrera para empleados
Te damos las 3 claves para desarrollar tu ruta de plan de carrera:
- Metas: : Establece metas a corto y largo plazo estimando el tiempo en que las debemos conseguir. Conseguir esas metas nos ayudará a percibir nuestro progreso y cuánto nos queda por delante. Por ejemplo, establecer metas anuales es una forma muy efectiva de comprobar si tu plan de carrera profesional ha sido diseñado apropiadamente. Igualmente, necesitas reevaluar tus objetivos ¿te está costando demasiado llegar hasta dónde querías?
- Formación: Contempla entre tus acciones realizar formación específica, aprender nuevos conocimientos y habilidades. La formación hará de tu perfil profesional un perfil más competitivo en el mercado laboral, lo cual impacta directamente en tu desarrollo profesional. Todas las empresas se interesan por la formación recibida hasta el momento: ¿Por qué realizó dicha formación? ¿Qué le apasiona de ésta? y ¿A qué quiere dedicarse profesionalmente con estos estudios?
- Contactos: Te puede resultar útil realizar una búsqueda de personas que ocupen un puesto laboral similar al que quieres alcanzar. Comprueba qué pasos ha seguido, qué formación ha cursado, por qué empresas ha pasado, qué competencias tiene, etc. Linkedin puede ser una buena herramienta para encontrar a profesionales interesantes.
Ventajas del plan de carrera para la empresa
Cuando se incorporan nuevas personas a una organización, es fundamental que conozcan, para el medio/largo plazo, el potencial del puesto que van a ocupar.
Para ello, se necesita una buena definición de plan de carrera en una empresa. Además de ayudar al planteamiento estratégico de la compañía y orientar el camino profesional de los trabajadores, ayuda al trabajador a definir los aspectos que quiere destacar y mejorar en su carrera.
Puede ser una plataforma perfecta para el desarrollo de la creatividad y habilidades de la persona.
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Definición plan de carrera por parte del equipo de Recursos Humanos
Por ello, vamos a analizar las claves que se deben contemplar desde el departamento de recursos humanos cuando diseñemos un plan de carrera para los nuevos compañeros:
1. Tratar de forma colaborativa, entre departamento de recursos humanos y trabajador, las futuras tareas a realizar.
A través de estas conversaciones pueden aflorar las habilidades y potencial de la persona, ya que exponiendo sus preferencias podremos “adecuar” los puestos de trabajo en función de las tareas preferentes de cada persona.
2. Establecer hitos y fechas clave, tanto para trabajador como para empresa.
Una de las formas de marcar las pautas y los ritmos de la carrera es establecer fechas clave e hitos a conseguir por ambas partes. De este modo, se podrá planificar ciertas respuestas a la consecución de hitos y contribuirá a la motivación del trabajador al tener plazos establecidos para conseguir los objetivos marcados.
3. Complementar todo el proceso con formación.
Independientemente de que el trabajador tenga, o no, diseñado un plan de carrera, hemos de pensar en la formación como un instrumento más de progreso dentro de la organización. Pues en trabajadores con un plan de carrera específico se hace más importante el contar con unos planes de formación específicos que contribuyan de forma más directa al progreso personal y profesional del empleado.
4. Acompañamiento y mentoring.
Si suponemos que el plan de carrera se centra en un avance dentro de la organización, es indispensable que se diseñe también un plan de acompañamiento a esta persona. Bien con un mentor que aconseje y muestre los aspectos clave de las futuras tareas a desempeñar, o bien con una persona de referencia que ayude en la adaptación a los nuevos objetivos y metodologías.
5. Transparencia y comunicación con el trabajador.
Como todo proyecto a largo plazo, no sería anormal que surgieran imprevistos que desviaran los objetivos y el plan marcados a nivel inicial, por lo que es fundamental que se tenga total transparencia respecto a los procesos con el trabajador en cuestión. Además de fluidez en la comunicación, pues el desarrollo del trabajador va íntimamente relacionado con el sentimiento de pertenencia al proyecto, lo que implica que esta persona conozca de primera mano los elementos que influyen en el devenir del propio proyecto.
Hemos de tomar el plan de carrera como una herramienta útil y viable, no solo para diseñar una orientación profesional de un trabajador, sino como elemento muy valorable para la atracción del talento.
Ejemplos de planes de carrera, y cuándo aplicar cada uno
Un ejemplo de plan de carrera profesional no tiene por qué seguir una única estructura. De hecho, los mejores son aquellos que se adaptan al momento y situación profesional de cada persona, así como a su perfil y al contexto real de la empresa. Por eso más que pensar en un modelo cerrado, es más interesante trabajar con enfoques complementarios que sirvan como guía para construir una ruta de desarrollo personalizada. A continuación, puedes ver 4 ejemplos de planes de carrera:
Planes orientados a resultados
Hay momentos en los que el desarrollo no tiene tanto que ver con cambiar de rol, sino con hacer mejor lo que ya se hace. En estos casos, el plan de carrera puede centrarse en reforzar competencias específicas, permitir el acceso a nuevos desafíos dentro del mismo equipo o incluso asumir pequeñas responsabilidades de coordinación.
Planes de reorientación profesional
En este caso, el plan de carrera funciona más como una herramienta de exploración para que el trabajador encuentre sus puntos fuertes y débiles, así como sus metas profesionales.
Plan de capacitación técnica
Este ejemplo de plan de desarrollo profesional permite a los trabajadores profundizar en su especialidad a través de formación avanzada, proyectos exigentes o con una participación activa en iniciativas de alto impacto.
Plan de posicionamiento interno
Este plan de carrera considera a aquellas personas que están listas para dar un paso más, pero no lo consiguen porque quizá no tienen la suficiente visibilidad. Así, les ayuda a ganar presencia a conectar con líderes o compartir sus ideas y logros.
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