Si miramos a nuestro panorama empresarial se hace necesario tener en cuenta la vigilancia tecnológica como herramienta fundamental de cara a la gestión estratégica de la información científico-tecnológica del ámbito en el que nuestra empresa desarrolle sus principales negocios.
Nuestro entorno va cambiando con cada uno de los avances tecnológicos que se presentan y por tanto la forma de gestionar nuestro grupo corporativo también se modifica y se actualiza. Así, innovar ya no es una opción sino una exigencia ya que los ciclos de vida de nuestros productos se acortan. Aquí, es donde además la globalización junto con Internet, se posicionan como una pieza clave de todo el entramado industrial ya que las tendencias son como la pólvora.
Como sabemos, la vigilancia tecnológica es un proceso organizado, selectivo y además permanente de captación de información sobre la ciencia y tecnología, tanto del exterior, como de la propia entidad. Pero no se queda ahí, sino que se selecciona y se analiza para de esta manera convertirla en conocimiento para tomar decisiones acordes con las exigencias del mercado y con nuestras propias posibilidades.
Infoxificación
¿Qué entendemos por infoxicación? Se trataría de la sobrecarga informativa, ya que disponer de demasiada información en ocasiones dificulta la toma de decisiones. La necesidad de comparar y seleccionar información se hace latente en el ámbito de la tecnología. En este sentido, la vigilancia tecnológica pretende dar respuesta a la exigencia de filtro de información ¿Cómo? Priorizando los datos relevantes.
Riesgo tecnológico
Los grupos corporativos deben ser conscientes del riesgo tecnológico y por tanto han de saber gestionarlo. La gestión del conocimiento en nuestros días, junto con la gestión de la tecnología deberá, ser una parte vital de las estrategias de innovación.
La vigilancia tecnológica junto con la inteligencia competitiva tiene un objetivo claro y es detectar oportunidades de mercado, a la par que pretende anticiparse a los posibles cambios de una gestión eficiente de la información del entorno, tanto en el ámbito científico como en el ámbito tecnológico.
Espionaje, el extremo de la vigilancia tecnológica
La vigilancia tecnológica deja de ser un proceso transparente y ético cuando las técnicas de gestión de la información abandonan el respeto a los competidores así como a las leyes vigentes, podríamos hablar entonces de espionaje industrial. Ahora bien, la frontera entre vigilancia tecnológica y espionaje es muy difusa, puesto que no hay unos límites totalmente definidos para la vigilancia tecnológica.
En este ámbito es interesante analizar la familia de normas ISO 27000, en especial la ISO 27001 referente al “El estándar de seguridad de la información”. La norma ISO a la que hacemos referencia, especifica los requisitos necesarios para establecer, implantar, mantener así como mejorar un sistema de gestión de la seguridad de la información.
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