En un mundo digital cada vez más lleno de ruido, lo que puede diferenciar entre un contenido viral y un contenido que pasa desapercibido puede depender en gran parte de la cantidad de contactos que tengamos y de la importancia de éstos para terceros. En este punto es donde entran en juego los influencers.
No es poco habitual que, cada vez que tenemos dudas sobre un producto o servicio, consultemos las opiniones de éstos a través de Internet. Cada vez hay una mayor confianza en las opiniones de los demás; de hecho, ya hemos pasado de recurrir a la búsqueda de opiniones en lugar de dejarnos llevar por los estímulos publicitarios.
Por todo ello, hay que considerar la incorporación de influencers en cualquier plan de marketing online y social media que queramos lanzar para incrementar el alcance de las campañas y, en consecuencia, las ventas.
En términos genéricos, un influencer es aquel que, con su influencia, puede ayudar a que la información que queremos lanzar se viralice sin necesidad de realizar grandes inversiones en campañas publicitarias.
Pero, si nos fijamos, los influencers siempre han existido. En todo momento ha habido personajes públicos que, por cualquier motivo (intelectual, cargo público, presentador de televisión, estrella cinematográfica, etc.), han sido capaces de influenciar a las grandes masas con sólo mencionar o promocionar una marca o producto determinados.
No obstante, lo que está claro es que los influencers están de moda y, más aún, ante el auge de las redes sociales y la gran variedad de opciones de divulgación de información que éstas ofrecen.
Tipos de influencers
Aunque la variedad de influencers es muy amplia, podemos destacar seis tipologías fundamentales:
- Celebrities: Se trata de famosos que son prescriptores simplemente por su perfil social. Éstos se aprovechan de su estatus social para difundir una determinada marca o campaña de marketing puntual en redes sociales.
- Líderes de opinión: Son la tipología de influencer más común en la actualidad. Se trata de personas que difunden una marca sin que ésta se lo solicite; simplemente le gusta el producto y lo recomienda.
- Comunicadores: Son especialistas en una materia determinada, tienen un blog o una web y cuentan con un gran número de seguidores. En este caso, el influencer ha logrado su posición manifestando sus opiniones como experto dentro de un sector concreto.
- Exploradores: Buscan las últimas tendencias principalmente en Internet y, si detectan un producto o marca que les pueda resultar de interés, manifiestan directamente su opinión a través de las redes sociales.
- Consumidores: Se trata de influencers curiosos; siempre tratan de probar servicios o productos que llevan poco tiempo en el mercado y comparten su opinión positiva o negativa mientras muestran con vídeos o imágenes su funcionamiento.
- Distribuidores o reporteros: Son influencers que están perfectamente informados de las últimas tendencias que surgen en Internet. Siempre están al día e informan a sus seguidores sobre las novedades de un producto, servicio o marca determinados.
¿Cómo seleccionar influencers?
Dada la gran variedad de tipos de influencers, es evidente que, por muchos seguidores que tengan, no todos ellos van a encajar con nuestra marca ni van a ser adecuados para nuestra estrategia de marketing online. Para ello, debemos conocer cómo identificar cuál es el influencer más acorde con nuestros valores y con los objetivos que pretendemos lograr.
Una vez decidamos cuál es el influencer más adecuado, debemos contactar con él y conseguir que promocione nuestra marca dando una buena imagen de ésta. No se puede hacer de cualquier forma, es imprescindible que tratemos que el influencer se sienta especial, contarle cuál va a ser su papel en la difusión de la marca y también qué es lo que la marca puede aportarles a ellos y a su imagen personal.
En estos casos, la transparencia es fundamental ya que el influencer será el que manifieste sus opiniones entre sus seguidores y, si tiene una mala imagen de nosotros, conseguirá ahuyentar a potenciales clientes. Sin embargo, si está convencido de la calidad de nuestros productos y servicios y se implica con nuestra marca, desprenderá ilusión y creará contenidos que influirán de forma positiva en sus seguidores.
En definitiva, no tratemos de convencer a nuestro influencer, si tenemos un producto o servicio de calidad y elegimos al influencer más adecuado, bastará con contactar con él y hacerle nuestra propuesta para que se “anime” a difundirnos.
