La locura por los vídeos 360º y el marketing digital

La continua evolución de las nuevas tecnologías genera un cambio constante en el mercado y en las preferencias de los consumidores que ya, en lugar de consumir (valga la redundancia) se han convertido en auténticos prosumidores. Un ejemplo de ello lo encontramos en los vídeos 360º.

Nuevas formas de llegar a los clientes, nuevos formatos, nuevas perspectivas, nuevas redes sociales… en definitiva, se abre un amplio abanico de oportunidades para llegar al target objetivo que toda empresa que quiera tener cierto alcance no debe menospreciar.

Como acabamos de comentar, un formato que cada vez más se plantea como estrategia a los profesionales del marketing son los vídeos 360º, que convierte al videomarketing en una de las estrategias más bien valoradas y eficaces en la actualidad.

Los vídeos 360º (denominados también VR, virtual reality) tienen la peculiaridad de estar grabados desde todos los posibles ángulos del entorno y pueden visualizarse prácticamente desde cualquier navegador web. Estos vídeos permiten a sus usuarios interactuar con él en todo momento y elegir el contenido a ver en cada momento, ofreciendo así una mejor experiencia al consumidor.

Aunque los usuarios ya están familiarizados con este formato gracias a la popularización de Google Maps, el abaratamiento de las cámaras que permiten esta opción ha permitido a las empresas grabar vídeos 360º con un coste relativamente reducido y utilizarlos con más frecuencia en sus estrategias comerciales.

Nescafé fue una de las marcas en utilizar esta tecnología para enseñar a su target de clientes el proceso de producción del café. En el siguiente vídeo se muestra a los usuarios el proceso de recolección del grano de café:

Con esta campaña, Nescafé, además de mostrar a los usuarios la recolección natural del café, genera reconocimiento de marca y gana nuevos clientes potenciales.

Para aprovechar al máximo esta herramienta, se recomienda seguir una serie de consejos:

• Pensar como el target objetivo para conocer aquellos eventos donde nuestros clientes desearían estar y facilitarles una experiencia en 360º.
• Potenciar la emoción, ofreciendo una experiencia que toque la fibra sensible del usuario, con un evento, un personaje público, un lugar, etc, relacionados con éste.
• Lograr complicidad con la audiencia: Por ejemplo, si queremos mostrar un concierto, debemos procurar que la vista en 360 grados no muestre sólo al público, sino que muestre todos los puntos de vista y, sobretodo, puntos que suelen ser inaccesibles para los usuarios para fomentar el efecto sorpresa.
• Utilizar storytelling: Como vemos en el vídeo de Nescafé, contar una historia implica obtener mejores resultados. No obstante, no debemos limitarnos a grabar un documental sobre un hecho concreto, sino que debemos potenciar la historia que hay de fondo para seducir a la audiencia y termine viendo el vídeo de inicio a fin.
• Crear una serie formada por varios vídeos: Es mucho más efectivo grabar varios vídeos de corta duración que terminan contando una historia de forma global que grabar un vídeo eterno. Así se evita aburrir al consumidor y crear una vinculación en la que éste estará esperando ansioso la llegada del siguiente vídeo.

Como podemos deducir de los consejos que acabamos de mencionar, el principal objetivo del vídeo 360º es entretener al usuario y generar experiencias. Pero no se trata de una premisa reciente ya que, desde siempre, un contenido aburrido, largo o tedioso lo único que consigue es quedarse en el olvido.