¿No quiere tomar demasiados medicamentos? ¿Buscas
remedios naturales para la gripe y refriado?
¡Elige una alimentación sana como cura!
Se acercan las Navidades, una época marcada por las luces, el reencuentro, las comidas en familia y el acelerado trasiego por las gélidas calles debidamente ornamentadas, pero también, un periodo en el que los constantes cambios meteorológicos y de temperaturas tras la entrada/salida de los centros comerciales, favorecen de manera significativa la aparición de brotes de resfriados y gripe, pudiendo echar al traste con nuestras celebraciones, eventos y vacaciones navideñas. Por eso, y parafraseando a Hipócrates con eso de que “la alimentación sea tu medicación”, en este post te mostramos cómo prevenir y combatir estos episodios patológicos del aparato respiratorio sin necesidad de recurrir a los tradicionales fármacos.
Remedios naturales para la gripe. El rol de la alimentación.
Numerosos estudios han puesto de manifiesto que aquellas personas que presentan
deficiencias nutricionales están más predispuestas a padecer infecciones que aquellas personas que tienen cubiertas todas sus necesidades. Hecho que pone de relieve, una vez más, que una alimentación adecuada es la mejor herramienta para prevenir catarros y procesos gripales y mantener en orden y reforzar a nuestras defensas. Una correcta alimentación, además, no sólo es importante en términos
preventivos, sino que es fundamental para
paliar o minimizar los síntomas en aquellos casos en los que han hecho su aparición, reduciendo asimismo su duración.
ABC de la alimentación en la prevención y tratamiento de gripes y resfriados
A - Mantener un aporte adecuado de líquidos
Beber agua, zumos, infusiones y caldos, mantendrán la
hidratación corporal, evitando la resecación de la mucosidad y favoreciendo su fluidificación. Ésta es una máxima en el tratamiento dietético de estas afecciones, siendo asimismo la principal vía de eliminación de las toxinas de nuestro organismo.
Los caldos y las infusiones, suponen una alternativa agradable para cumplir con los requerimientos de agua diaria, y permiten gracias al calor, que nos sintamos mejor y reconfortados. Entre ellos recomendamos por su eficacia probada:
infusiones de jengibre (expectorante y descongestionador),
infusiones de canela,
caldo de pollo (contiene cisteína para el alivio de la congestión nasal y mucosidad) y
cebolla (antibiótico natural).
B- Aportar alimentos que refuercen nuestro sistema inmunológico
Se trata de incorporar a nuestra alimentación productos que
potencien el sistema inmunológico para evitar que aparezcan los resfriados y/o mejorar su sintomatología cuando lo hagan. Entre ellos encontramos:
Ajos y cebollas: ambos productos se caracterizan por sus propiedades bactericidas y antivirales, considerándose como antibióticos naturales. Además de estimular la función inmune tienen un potente efecto desinfectante y depurativo. Pueden consumirse crudos, cocidos o en infusiones.
Alimentos ricos en vitamina C: con elevado poder antioxidante, ejerciendo un importante influjo sobre todo en la recuperación una vez que los síntomas han aparecido. Actúan sobre la congestión nasal y suponen un aporte extra de líquidos que favorecen la hidratación. Son frutas como: naranjas, limones, pomelos, fresas, y verduras como: pimientos, coles, brócoli. Este último con un alto contenido en ácido fólico, calcio, hierro y vitamina E.
Legumbres y cereales integrales: fuente importante de vitamina B, hierro, selenio y zinc, con eficacia demostrada en procesos catarrales. El zinc, está demostrado que reduce el tiempo del resfriado si es aportado en los primeros signos del mismo.
Alimentos ricos en selenio y zinc: que actúan estimulando la función inmune. El selenio podemos encontrarlo en cereales completos, carnes, huevos, pescados, y legumbres, mientras que el zinc se localiza en quesos curados, legumbres, hígado, frutos secos…etc.
Especias: indicadas cuando no existe ningún problema a nivel estomacal, ya que sirven para descongestionar las fosas nasales. Pueden emplearse picante, cúrcuma y ajo molido.
C- Evitar: dietas especialmente grasas y de difícil digestión
Estos tipos de dietas pueden desencadenar episodios de náuseas, vómitos y mareos. Asimismo han de evitarse las bebidas alcohólicas y con altos niveles de cafeína pues producen deshidratación.
Si a todos estos
consejos nutricionales añadimos unas
correctas prácticas de higiene, una
vestimenta adecuada para protegernos de la inestabilidad térmica y meteorológica y un
descanso óptimos, nos convertiremos en auténticos candidatos a pasas estas fiestas y las que vienen, libres de gripes y resfriados.
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Biosanitario
Comentarios
Estimada Ana Isabel:
Gracias por compartir su opinión en un tema tan trascendente como es una buena alimentación. Siempre me gusta echar mano del sabio refranero español, y es que no hay nada más cierto que el clásico «es mejor prevenir que curar». Si de manera constante cubrimos nuestras necesidades y le damos a nuestro organismo los nutrientes que necesita para mantener en orden y fortalecidas sus defensas, probablemente escapemos de los consabidos brotes de gripe y resfriados, y en el caso de que caigamos en sus manos, será de una manera atenuada y no tan terrible.
Nuestra salud comienza con nuestra alimentación y eso es algo que debe de calar en la conciencia popular para: por un lado minimizar las bajas por enfermedad, y por otro contener el gasto farmacéutico tan innecesario.
De nuevo muchas gracias por su comentario, espero contar con sus opiniones en próximas publicaciones.
Un saludo
Estoy completamente de acuerdo con este artículo, en muchas ocasiones las personas por falta de información y curiosidad se medican con pastillas, cuando, sus verdaderos medicamentos los tienen en el mercado; frutas, hortalizas, lácteos, zumos e infusiones y otros tantos más. Además, dándole a nuestro cuerpo lo que necesita basado en una dieta equilibrada, nuestro sistema inmunitario se verá muy fortalecido y por tanto, le diremos adiós a los resfriados y gripes.
Un saludo.