Son las 3 am de la madrugada y aún sigues con los ojos como platos. Te levantas, te preparas una taza de leche calentita, y te acuestas esperando el ansiado abrazo de Morfeo. Pero nada, son las 5 y recurres a las famosísimas “ovejitas”. 1 oveja, 2 ovejas, 3 ovejas… Así, hasta que te das cuenta de que ya, a lo que puedes aspirar esta noche, es a resignarte a que suene el despertador para empezar con la rutina… ¿Te ves identificado? ¿Te suena la palabra insomnio?
¡Sigue leyendo! Te lo contamos todo acerca del insomnio: causas, posible cura, etc. ¡Empezamos!
No puedo dormir... ¿Qué me pasa, doctor?
Si la situación que te he descrito antes, te afecta, al menos, 3 días a la semana, durante un mínimo de 3 meses, y reduce tu calidad de vida; eres candidato para padecer insomnio. ¿Y qué es eso?
El insomnio es un trastorno del sueño que se define como la insatisfacción, por parte del individuo, en la cantidad y/o calidad de horas que duerme a lo largo de la noche. Las causas son muy variadas, pero la mayoría de ellas se relacionan con enfermedades neurológicas o digestivas, causas ambientales, duelo o aspectos relacionados con los trastornos de ansiedad.
¿Pueden existir diferentes clases de insomnio?
Sí. Concretamente, y a rasgos generales, existen 3 tipos de problemas para conciliar el sueño:
- Insomnio de inicio: la persona le cuesta conciliar el sueño. Es muy común en pacientes con una mala higiene del sueño o con problemas digestivos.
- Insomnio de mantenimiento: la persona se duerme pronto, pero se despierta a medianoche y ya no puede volver a conciliar el sueño. Es muy común en pacientes con trastornos de ansiedad y depresión.
- Trastorno del despertar precoz: la persona se despierta muy temprano. Es muy común en pacientes con estrés emocional o preocupaciones excesivas.
Dependiendo del diagnóstico que se realice por parte del médico, los tratamientos y terapias se enfocarán a distintos objetivos. Generalmente, todos ellos enfocados a:
- Reducir la privación del sueño.
- Conseguir un sueño más reparador.
- Mejorar la higiene del sueño.
- Proponer técnicas psicoterapéuticas que ayuden a mejorar la conciliación del sueño, además de proporcionar técnicas relacionadas con el alivio psicológico.
¿Cuánto tiempo puedo estar, como máximo, sin dormir?
Según un estudio reciente, realizado en la Universidad de California, el tiempo máximo que un individuo puede estar sin dormir son 11 días. No obstante, los primeros problemas relacionados con la privación de sueño suelen aparecer a los 3 días, relacionados la mayoría de ellos con temblores, desmayos, mareos… No obstante, también pueden aparecer otros mucho más graves, como alucinaciones, pérdida de contacto con la realidad o lapsus importantes de memoria. Es más, la falta de sueño asociado a insomnio se considera como una de las mayores lacras sociales en el siglo XXI.
Pero, ¿puedo llegar a morir si no duermo?
La respuesta es sí. Es más, según las últimas estadísticas registradas en España, 11 personas fallecieron por una cronificación de la falta de sueño en 2022. Pero, estarás pensando en cómo se puede llegar a esta situación. ¿Te suena el llamado insomnio familiar fatal? Quizás lo hayas escuchado alguna vez, o lo has visto en algún documental, pero en este post te lo voy a explicar con mayor detalle.
Primero, no te asustes, que la prevalencia del insomnio familiar fatal entre la población es muy baja, ya que se debe a un defecto genético muy poco frecuente. Aunque la predisposición a padecer esta dolencia está presente desde el nacimiento, los primeros síntomas surgen entre los 20 y 61 años, con una media de 50 años. Afecta por igual a hombres y a mujeres. Aunque aún no se conocen sus causas, parece que este tipo de trastorno se manifiesta como una pérdida neuronal, debido a un acúmulo patológico de proteínas. Y aquí es cuando estarás empezando a pensar ¿Qué me estás diciendo? Pues explicado en palabras llanas, podríamos decir que nuestras células cerebrales se van intoxicando progresivamente con esta proteína, surgiendo una “borrachera continua y prolongada”, que terminará sumiéndolas en un gran desgaste funcional y en su posterior muerte.
Al no presentar tratamiento curativo, esta enfermedad suele conducir a la muerte, siendo su esperanza de vida de 18 meses tras su diagnóstico (aunque estos datos pueden variar entre 7 y 36 meses).
Los pacientes pueden presentar, inicialmente, insomnio leve que aumenta en gravedad a medida que avanza la enfermedad. Sin embargo, los sueños vívidos son comunes durante la cantidad limitada de tiempo de sueño. La somnolencia diurna no es infrecuente. Aparte de todo lo anterior, el enfermo puede presentar otros síntomas como presión arterial alta, episodios de taquipnea, aumento del lagrimeo y/o sudoración, estreñimiento, disfunción sexual, variabilidades en la temperatura corporal, pérdida de peso y cambios de humor.
¿Existe tratamiento para el insomnio?
En realidad, y como se ha comentado antes, no existe un tratamiento efectivo para que la persona que padece insomnio familiar fatal se recupere. La terapia se centra, en gran medida, en el alivio sintomático y los cuidados paliativos. Las diferentes modalidades de tratamiento son las siguientes:
- La interrupción de los medicamentos que pueden exacerbar la confusión, la memoria y / o el insomnio es importante, especialmente los barbitúricos y benzodiazepinas.
- Los problemas para tragar pueden justificar la colocación de una sonda de alimentación.
La terapia psicosocial es importante tanto para el paciente como para la familia. El cuidado de cuidadores expertos también puede ser beneficioso, muy beneficioso. Si quieres aprender más sobre este tema, te aconsejo el Máster de Psicología General Sanitaria de INESEM.
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