INESEM Business School
Contactar por whatsappWhatsapp

Contacta con nosotros

Teléfono de INESEM 958 050 205
Neuropsicología de la Educación: Implicaciones Educativas
Te ayudamos a elegir tu formación

Neuropsicología de la Educación: Implicación del cerebro en el Aprendizaje

Antes de profundizar en el ámbito de la neuropsicología de la educación y sus implicaciones en el aprendizaje, vamos a definir algunos conceptos importantes.

La neuropsicología general estudia la relación entre el cerebro y el comportamiento. Pero, en el estudio de los niños, hay que tener en cuenta que el objeto de estudio no es un cerebro maduro sino un cerebro en desarrollo. La característica principal de este cerebro en desarrollo es la gran neuroplasticidad con la que cuenta. La neuroplasticidad o plasticidad cerebral es la capacidad del cerebro para adaptarse y cambiar como resultado de la conducta y la experiencia.

Del estudio del cerebro en desarrollo y su relación con el comportamiento se encarga la neuropsicología de la educación.

Debido a esto, el proceso de enseñanza y aprendizaje tendrá una gran repercusión en su desarrollo  siendo especialmente relevante a la hora de diseñar estrategias educativas, tener en cuenta las posibilidades con las que cuenta el niño o la niña según su maduración cerebral.

Todo hombre puede ser, si se lo propone, escultor de su propio cerebro. Ramón y Cajal

Implicaciones educativas de la neuropsicología del aprendizaje

En estos últimos años se ha producido un gran interés por conocer el cerebro y el modo en el que se interrelaciona con el el proceso de enseñanza y aprendizaje.

¿Qué puede aportar la Neuropsicología de la Educación? Parece ser que mucho.

La Neuropsicología Infantil se encarga de aportar un conocimiento más profundo acerca de cómo un niño o niña aprende y maneja la información. Además, estudia qué estrategias pueden llegar a ser más efectivas a la hora de abordar las posibles necesidades específicas del alumno/a.

El cerebro y las funciones cerebrales tienen una fuerte implicación en los procesos de aprendizaje durante la etapa escolar.

La educación como transformación

Las experiencias de aprendizaje cambian la forman en la que percibimos, actuamos, pensamos y planificamos. El cerebro se transforma por medio de la adquisición de nuevas experiencias, produciendo cambios  tanto en su estructura como en su funcionamiento.

Ambientes enriquecedores favorecerán las funciones cognitivas. Aquí radica la fuerza de la neuropsicología de la educación.

Todo aprendizaje modificará nuestro cerebro.

Conocer cómo aprendemos

Como ya hemos visto,  hay momentos especialmente adecuados para aprender porque el cerebro tiene mayor plasticidad. Durante la infancia el cerebro se encuentra en un proceso de desarrollo expansivo muy fluido, cosa que no sucede en el adulto ya formado, pues este tiene consolidada tanto su estructura cerebral como sus conexiones

     (Portellano y García Alba, 2014)

Si no hay estímulo no hay aprendizaje. Si no hay aprendizaje no hay modificación en el cerebro.  En este sentido, tiene especial importancia la multisensorialidad, cuantos más estímulos haya, más sentidos habrá implicados, mayores conexiones y por tanto, mayor aprendizaje.

Hay que tener presente la importancia de conocer los mecanismos por los que los niños y niñas aprenden. Cómo y cuándo se desarrollan estos mecanismos y en qué momento  poseen la estructura neurocognitiva funcional para poder integrar los aprendizajes.

El cerebro es un todo

En 1977, Paul MacLean  elaboró un modelo de cerebro basado en su desarrollo evolutivo. McLean diferenció 3 "cerebros" interconectados. En orden de aparición son: el cerebro reptiliano, el límbico y el neocórtex.  De ellos surgen las principales formas de la conducta humana:  física, emocional y lógica.

La intervención educativa ha de ser intencional, global e íntimamente relacionada con todas las áreas corticales en constante asociación. La actuación sobre el cerebro ha de ser global; hay que actuar sobre ambos hemisferios porque , si no, no se conseguirá que los alumnos aprendan correctamente.  Como sabemos, la parte izquierda del cerebro es la analítica y la derecha es la intuitiva.

Sin embargo, debemos tener en cuenta que la maduración del cerebro es desigual y compleja: de nada sirve enseñar los colores a un niño que todavía tiene visión en blanco y negro. Una buena intervención neuropsicológica requiere de la suficiente madurez de todos los sistemas que perciben, integran, relacionan y analizan la información.

(Ferré y Aribau, 2006)

La intervención debe ser temprana y profesional

Hay procesos de aprendizaje más adecuados a unas edades que a otras. La escuela y el aula son el escaparate donde más podemos comprobar los efectos de un déficit neuropsicológico. Resulta necesario que los docentes tengan conocimientos básicos en neuropsicología de la educación para comprender y orientar de forma eficaz a sus alumnos. ¿Estás de acuerdo?

Períodos críticos de aprendizaje según la neuropsicología educativa

Para conocer el proceso mental de aprender, debemos saber cuáles son las claves del aprendizaje. Una de las más importantes es la neuroplasticidad. La plasticidad cerebral nos enseña que hay periodos especialmente adecuados para determinados aprendizajes.

Un buen ejemplo de ello es la adquisición de lenguas. La neurociencia nos dice que los periodos más adecuados para el desarrollo del lenguaje son los 6 o 7 años primeros de vida. La primera lengua se adquiere hasta los 3 o 4 años.

El  cerebro se desarrolla a distintos ritmos y unas partes del cerebro se desarrollan antes que otras. Esto es crucial a la hora de  identificar el momento adecuado para realizar unos aprendizajes u otros porque el cerebro también está especializado. Esto no quiere decir que las partes del cerebro no estén relacionadas. Hay un orden jerárquico en esa evolución cortical. Por ejemplo, las partes del cerebro que maduran antes son las sensomotoras. Y, las que se maduran con posterioridad son las asociativas.

Un  estudio realizado por científicos del Center for Neural Science (NYU)  revela la importancia de las experiencias de aprendizaje durante los primeros 2-4  años de la vida.

Lo que nuestros resultados nos dicen es que los cerebros de los niños necesitan estimulación para obtener una activación suficiente y saludable, incluso antes de entrar enpreescolar […]”, explica Cristina Alberini, profesora en el Center for Neural Science de NYU, que dirigió el estudio; “[…] sin esto, el sistema neurológico corre el riesgo de no desarrollar adecuadamente las funciones de aprendizaje y memoria.

Habilidades neuropsicológicas básicas

Distinguimos cuatro de estas habilidades neuropsicológicas consideradas fundamentales para el correcto desarrollo cognitivo y estudiantil del niño: los procesos neuromomotores, la capacidad visual, la capacidad auditiva y la lateralidad corporal. Desde el punto de vista de la neuropsicología del aprendizaje no solo deben evaluarse esta cuatro competencias por separado, sino que las cuatro han de integrarse de forma que cree un sistema global coordinado que permita la adecuada orientación espacial, capacidad de comunicación oral, así como la correcta codificación de símbolos escritos. Así pues, procedemos a detallar más a fonodo estas detrezas:

Procesos neuromotores

En resumidas cuentas, nos referimos a la capacidad motriz general de los niños. Durante su desarrollo motriz, los más pequeños van adquiriendo más habilidades de movimiento, nuevos rangos de desplazamiento y acciones motrices más precisas. Este proceso no se completa en la infancia, sino que se extiende hasta la edad adulta y va de la mano de la evolución biológica, psicológica y social de la persona. Así pues, los procesos neuromotores pueden evaluarse a partir de las habilidades motoras gruesas (arrastrarse, gatear, andar) y de las habilidades motoras finas (agarre y manipulación de objetos).

Lateralidad

Llamamos lateralidad a cómo se distribuyen los actos del día a día entre los hemisferios izquierdo y derecho del cerebro y su consiguiente especialización. Es por esta lateralidad que a la mayoría de nosotros se nos puede clasificar en zurdos o diestros, puesto que una parte de nuestro cuerpo es más operativa y dominante que su contraria. Por norma general, la lateralidad ha de ser homogénea, es decir, debe coincidir el hemisferio prevalente para pies, ojos u oídos. En caso de disparidad de funciones según hemisferio, estaríamos hablando de lateralidad cruzada. Está comprobado que la lateralidad cruzada es causa de problemas de aprendizaje, especialmente a la hora de adoptar procesos de lectura y escritura, así como psicomotrices.

Funcionalidad visual

Las habilidades visuales básicas siempre han sido esenciales en el aprendizaje, especialmente porque facilitan la adquisición de nuevos conocimientos mediante la lectura. Con la incorporación de los dispositivos electrónicos y otros formatos tecnológicos, se ha vuelto todavía más crucial en el proceso de aprendizaje para niños pequeños. Así pues, en la funcionalidad visual correcta para la neuropsicología del aprendizaje incluimos todos los movimientos oculares que posibiltian una lectura fluida: movimientos sacádicos (rápidos), de fijación, de seguimiento y de regresión.

Funcionalidad auditiva

La funcionalidad auditiva es esencial en el proceso neuropsicológico de aprendizaje, ya que permite al cerebro procesar y comprender la información auditiva necesaria para el aprendizaje exitoso. La capacidad de escuchar y procesar el habla y los sonidos del entorno es crucial para el desarrollo de habilidades lingüísticas y cognitivas, como la lectura, la escritura, la comprensión del lenguaje y la memoria verbal. Los problemas de la funcionalidad auditiva interfieren con la capacidad del cerebro para procesar y comprender la información auditiva de manera efectiva.

La prevención en la neuropsicología del aprendizaje

Es fundamental para el desarrollo de la neuropsicología de la educación, conocer las dificultades y trastornos de origen neurológico ya que  permitirán realizar acciones de prevención en el aula.

Los aprendizaje previos condicionarán los aprendizaje posteriores. Esta es una de las consecuencias de la plasticidad cerebral y de la forma en la que aprendemos.

Por tanto, si el cerebro no aprende correctamente, bien por estímulos inadecuados, bien por una actuación inadecuada o por razones intrínsecas, los aprendizajes posteriores serán mucho más dificultosos.

Conocer cómo funcionan los hemisferios cerebrales y la integración interhemisférica a través del cuerpo calloso resulta fundamental  para poder prevenir y tratar las dificultades de aprendizaje.

Factores que influyen en el aprendizaje

Diferentes estudios e investigaciones del sistema educativo, muestran que más del 50% de las dificultades de aprendizaje que  se encuentran en las aulas son debidas a (Ministerio de Educación y Deporte, 2017):

• Alteraciones de tipo neurofuncional: Entre ellas podemos distinguir la dislexia (alteración de la capacidad de lectura y escritura), el TDAH (deficiencia de atención y autorregulación), TEA (trastornos del espectro autista), trastorno obsesivo compulsivo (incapacidad para controlar pensamientos y comportamientos repetitivos) y el síndrome de Tourette (que comprende tics molestos e inhabilitantes). • Trastornos de la percepción: Entre ellas distinguimos el trastorno del procesamiento auditivo, la dispraxia (alteración en la coordinación de movimientos), agnosia (dificultades para reconocer estímulos sensoriales), trastorno de procesamiento visual, etc. • Fallos en la organización de los esquemas funcionales de la memoria visual y la memoria auditiva: Es decir, la dificultad para almacenar y recuperar información de manera eficiente en estas áreas de la memoria. La memoria visual es responsable de almacenar y recuperar información visual, mientras que la memoria auditiva es responsable de almacenar y recuperar información auditiva. • Problemas de integración interhemisférica: La integración interhemisférica se refiere a la comunicación y coordinación entre los dos hemisferios del cerebro, el hemisferio derecho y el hemisferio izquierdo. Los problemas de integración interhemisférica pueden tener un impacto negativo en el aprendizaje, ya que pueden interferir con la capacidad del cerebro para procesar y comprender la información de manera efectiva. • Alteraciones de la organización temporal y espacial: Estas alteraciones pueden tener un impacto negativo en el aprendizaje, ya que interfieren con la capacidad del cerebro para ordenar y comprender la información de manera secuencial y estructurada. Por ejemplo, los estudiantes con dificultades en la organización temporal suelen experimentar dificultades para recordar secuencias de eventos, como la secuencia de los días de la semana o las operaciones matemáticas en el orden correcto.

Es imprescindible realizar acciones de prevención a través de la potenciación del desarrollo de los aprendizajes perceptivos y motrices que van a constituir la base de futuros aprendizajes.  Esto se debe a que se consideran el desarrollo sensorial y el motriz las bases fundamentales del neurodesarrollo del niño.

La novedad en la neuropsicología del aprendizaje

La neuropsicología de la educación nos ayuda a mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje. La Neurociencia nos dice cómo aprendemos y las claves del aprendizaje.

Uno de los instrumentos de mejora consiste en comprender cómo el cerebro responde a estímulos  y lo hace con más intensidad cuanto más novedoso y complejo es el estímulo. Ante estímulos conocidos el cerebro responde con menos intensidad.

"Cuantos más sentidos implicados, mayor activación de áreas cerebrales y mayor eficacia en el asentamiento de aprendizajes".

Para que los niños y niñas sean capaces de realizar actividades intencionales, complejas y novedosas entra en juego un sistema perfecto y complejo llamado: “funciones ejecutivas”. Lezak (2004) define el termino como “aquellos procesos para realizar un comportamiento de forma eficaz y creativa y adecuado en términos sociales”.

Funciones ejecutivas

Las funciones ejecutivas ayudan a:

  1. Establecer el objetivo deseado.
  2. Planificar y elegir las estrategias necesarias para la consecución del objetivo.
  3. Organizar y administrar las tareas.
  4. Seleccionar las conductas necesarias.
  5. Ser capaces de iniciar, desarrollar y finalizar las acciones necesarias.
  6. Resistir la interferencia del medio, evitando las distracciones por estímulos de poca relevancia.
  7.  Inhibir las conductas automáticas.
  8. Supervisar si se está haciendo bien o no y tomar conciencia de los errores.
  9. Prever las consecuencias y otras situaciones inesperadas.
  10. Cambiar los planes para rectificar los fallos.
  11. Controlar el tiempo y alcanzar la meta en el tiempo previsto.

Las funciones ejecutivas se desarrollan durante todas las etapa y alcanzan la maduración cuando llegan al sistema universitario.

Algunos aspectos de las funciones ejecutivas que podrían ser objeto de intervención por parte de docentes y familias son:

  • La inhibición.
  • La atención.
  • La memoria de trabajo.
  • Las emociones y la motivación.
  • El lenguaje interior.
  • La planificación, la resolución de problemas y la reconstitución.

El control de las emociones para la neuropsicología del aprendizaje

Existe una clara relación entre las emociones y el aprendizaje. No cabe duda. La inteligencia Emocional defiende la idea central de que las  competencias emocionales son un factor crucial a la hora de explicar el funcionamiento del sujeto en todas las áreas de la vida (Mikolajczak, 2006).

La neurociencia contribuye a mejorar la situación emocional y el comportamiento y convivencia dentro del aula. Las áreas cerebrales encargadas del procesamiento de las emociones constituyen el  "cerebro emocional", el sistema límbico.

Salovey y Mayer (1990) señalaron 5 capacidades que constituyen la competencia emocional y que están muy relacionadas con la convivencia en el aula y el desarrollo de la Neuropsicología de la Educación. Estas capacidades son:

  • Reconocer las propias emociones;
  • Saber manejar las propias emociones;
  • Utilizar el potencial existente;
  • Saber ponerse en el lugar de los demás,
  • Crear relaciones sociales o facilidad de establecer relaciones interpersonales.

Estudios reciente muestran como un buen desarrollo emocional por parte de los docentes resulta  imprescindible, tanto por su propio bienestar personal, como para que puedan llevar a cabo su labor docente de forma efectiva (Sutton, 2003).

La inteligencia emocional de los profesores afecta a los procesos de aprendizaje, a la salud mental y física, a la calidad de las relaciones sociales y al rendimiento académico y laboral (Brackett y Caruso, 2007).

El cerebro es nuestro órgano de aprendizaje y el sustrato necesario son: los estímulos, las situaciones de aprendizaje, las conductas y las emociones.


¡La Neuropsicología de la Educación es una disciplina de gran importancia  y con grandes repercusiones en el ámbito que compete!

Para que puedes saber más sobre esta temática aquí te dejamos dos enlaces de interés:

Categorizado en: Educación y Sociedad

Solicita información




    Información básica sobre Protección de Datos. Haz clic aquí

    Acepto el tratamiento de mis datos con la finalidad prevista en la información básica

    ¿Quieres más artículos de Educación y Sociedad ?

    Selecciona la categoría que más te interese

      Comentarios

    1. MARCELO LUDGARDO PROAÑO COBOS dice:

      Muy interesante el aporte para aplicarlo en el aula de clases, muchas gracias

    2. MARCELO LUDGARDO PROAÑO COBOS dice:

      Muchas gracias excelente aporte y muy útil poder aplicarlo en el aula de clases

    3. Guadalupe Saldaña dice:

      Me encanto
      Mil y un Gracias
      Genial

    Ver más comentarios

    ¡Descubre los secretos de inesem en nuestro canal de Telegram!

    Artículos más leídos

    Descubre Territorio Inesem

    Disfruta del mejor contenido con los últimos podcast y webinars

    ES EL MOMENTO

    Comienza tu futuro de la mano de INESEM Business School con el programa de

    EXECUTIVE MASTERS

    Únete al selecto grupo de alumnos que han conseguido alcanzar una carrera de éxito en las profesiones más demandadas.

    ÚNETE AL EQUIPO DE REDACCIÓN

    Comparte tu conocimiento con otros profesionales

    Saber más